Necesitamos:
250 gramos de mantequilla
250 gramos de azúcar glass
30 gramos de azúcar invertida
4 huevos
1 sobre de levadura royal
250 gramos de harina
125 ml de nata líquida
Para el glaseado:
150 gramos de azúcar glass
1 clara de huevo
Zumo de medio limón
Precalentamos el horno a 190 grados con calor arriba y abajo.
Batimos la mantequilla en punto de pomada con el azúcar hasta que blanquee. Añadimos el azúcar invertida, que le dará esponjosidad al bizcocho.
Agregamos uno a uno los huevos, y una vez integrados, echamos la nata líquida y la levadura.
Por último, incorporamos la harina, mezclando con movimientos envolventes suaves para no bajar la masa y que crezca más en el horno.
Llevamos al horno en un molde circular de 18 cm de diámetro, engrasado previamente para que no se pegue el bizcocho.
Dejamos 50-60 minutos a temperatura 190 grados. A los 50 minutos pincháis el bizcocho con un cuchillo por el centro, si sale limpio el cuchillo ya podéis sacarlo del horno, si no es así, repetís la operación cada 5 minutos hasta que os salga limpio.
Hacemos el glaseado, sólo tenemos que mezclar el azúcar glass, con la clara de huevo y el zumo de medio limón. Reservamos.
Desmoldamos el bizcocho y echamos por encima el glaseado, cuando todavía esté caliente.
Dejamos enfriar antes de comer.
Espero que lo hagáis en casa y me contéis que os parece, a mi me encanta su sabor!!!!
No hay comentarios :
Publicar un comentario