Pastelitos de bizcocho borracho, crema pastelera y chocolate

Hoy es el cumpleaños de mi abuela, y para celebrarlo he hecho de postre estos pastelitos que están deliciosos ( lo sé porque ya he catado uno, no me he podido controlar, jajaajajaj)

Necesitaremos:

Para el bizcocho:

4 huevos

100 gramos de azúcar

100 gramos de harina de repostería

1 sobre levadura royal

1 cucharadita de café de esencia de vainilla

Para el almíbar:

100 ml de agua

100 gramos de azúcar

1 buen chorretón de ron

Para la cobertura de chocolate:

100 gramos de mantequilla

200 gramos de cobertura de chocolate

100 gramos de azúcar glass

Para la crema pastelera:

500 ml de leche

50 gramos de maicena

100 gramos de azúcar 

3 huevos

1 cucharadita de café de esencia de vainilla

Empezamos con el bizcocho, es muy fácil de hacer una plancha de bizcocho y rápido además.

Precalentamos el horno a 200 grados con calor arriba y abajo.

Batimos bien los huevos con el azúcar hasta que la mezcla blanquee.

Añadimos la esencia de vainilla y por último agregamos la levadura y la harina, mezclando con movimientos envolventes.

Ponemos la mezcla en una bandeja de horno forrada con papel vegetal. Extendemos la mezcla formando una plancha ( como un rectángulo ) con las dimensiones de la bandeja. Yo tengo un horno grande y las bandejas también lo son, así que he recubierto 3/4 partes de la bandeja, para que el bizcocho no me quedase demasiado fino. No hace falta que toda la bandeja esté recubierta, lo que si es necesario es que aliséis con la espátula la masa y la extendáis uniformemente, para que la plancha de bizcocho salga lo mas igual en grosor posible.

Metéis al horno durante 15 minutos.

Sacáis, dejáis enfriar un poco, retiráis el papel vegetal, cortáis los bordes para formar un rectángulo perfecto y después cortáis por la mitad, ya que cada mitad será uno de los pisos de los pasteles.

Reserváis.

Ahora hacemos el almíbar, facilísimo también. En una sartén a fuego medio, ponemos el agua, el azúcar y el ron, y revolvemos sin parar hasta que se disuelva el azúcar.
Sacamos del fuego, pasamos a un recipiente hasta que enfríe un poco.

Ahora pasamos a emborrachar a los bizcochos. Yo primero le echo al bizcocho unas gotitas de ron, por toda la superficie. Se lo he visto hacer a mi suegro, que es uno de los mejores confiteros del mundo mundial, y la verdad, es que le da un aroma bárbaro.
Después, pinto bien las dos partes de bizcocho, que quede bien mojado.

Una vez emborrachado el bizcocho, vamos a por la crema pastelera.
Para hacerla, emulsionamos en un cazo los huevos batidos, la maicena, la leche, el azúcar y el aroma de vainilla, todo ello a fuego medio y revolviendo continuamente. Cuando forme una crema espesa ya la tenemos lista.
Dejamos enfriar un poco, como unos 5 minutos, en un recipiente tapada con papel de film para que la superficie no forme costra.
Después ya podemos montar los pasteles. Ponéis una de las partes del bizcocho debajo, encima irá la crema pastelera bien repartida, y arriba la otra parte del bizcocho.

Sólo nos queda hacer la cobertura de chocolate. Para ello, batimos la mantequilla que ha de estar a temperatura ambiente, con el azúcar glass. Añadimos a esta mezcla, el chocolate que habremos derretido al baño María. Cuando tengamos todo bien mezclado, cubriremos con la cobertura (reservando un  poquito para hacer la decoración) la parte de arriba del bizcocho.
Cortamos en cachitos, según lo grandes que queráis los pastelitos.
Para decorar, con una manga pastelera y boquilla Wiltón 2D ( como esta), hacemos en cada pastelito por encima una flor ( si los hacéis de tamaño mayor, podréis hacer mas de una en cada pastel).
Para hacer la flor, es muy sencillo, solo tenéis que apretar un poquito, soltar, y listo!!!! (ensayar antes en un plato si nunca las habéis hecho).
Meter al frigorífico por lo menos un par de horas antes de comer, para que la crema pastelera esté bien fría.
Hoy nos vamos a poner moraos!!!!, jajaajajajajajajaja.