Tarta de comunión con frosting de queso y fresas

Esta tarta es fácil de hacer, necesitamos:
Para el bizcocho
6 huevos
200 g de azúcar
200 g de harina

Para el relleno
Almíbar
Mermelada de fresas

Para el frosting
250 g de queso Philadelphia
400 g de nata montada
150 g de azúcar glass
2 cucharadas de pasta de fresas


Vamos a hacer el bizcocho primero:
Batimos los huevos y el azúcar y después añadimos la harina, mezclando la con la mano haciendo movimientos envolventes.
En el horno, precalentado a 190 grados, con calor arriba y abajo, metemos la masa en un molde circular de 10 cm de diámetro. Podéis encontrarlo en Megasilvita, aquí
durante unos 50 minutos aproximadamente.
Dejamos enfriar antes de desmoldar.

Cortamos el bizcocho en tres capas con dos dedos de grosor. Cada una de las capas las empapamos con almíbar, y entre las capas ponemos mermelada de fresas.
El almíbar se hace con 100 ml de agua, 100 gr de azúcar y unas gotas de coñac, calentándolo en una sartén hasta que el azúcar se disuelva y emulsione todo ( tarta un minuto ). Dejarlo enfriar un poco antes de utilizarlo.
Para empapar las capas de bizcocho con almíbar, utilizar un pincel grueso de cocina.

Para hacer el frosting de queso y fresas, batimos la nata para montar con el azúcar glass, con el accesorio varillas, tanto podemos utilizar la kitchenaid como una batidora, hasta que tengamos la nata montada ( entre 5 a 10 minutos),  y reservamos en la nevera.

Por otro lado, batimos el queso Philadelphia con la pasta de fresas.  En Megasilvita tenéis pasta de fresas,  aquí

Por último unimos con cuidado la nata montada con el queso y la pasta de fresas. 

Para decorar la tarta, cubrimos la superficie con una capa de frosting, y la extendemos con una espátula lo más posible. Metemos en la nevera durante media hora. Esta es la capa cubre migas, se van a quedar migas a la vista, no os preocupéis, luego la taparemos.

Después de pasada la media hora, cubrimos con otra capa de frosting y alisamos de nuevo con la espátula. 

Con el resto del frosting, en una manga pastelera hacemos los contornos ( como bolitas).

Terminamos poniendo unas bolas de chicle y corazones de azúcar ( los venden en muchos supermercados ).

Es una tarta rica, y preciosa a la vista. Ideal para las celebraciones infantiles.